La hermeticidad, impermeabilidad o sumergibilidad de los relojes está sujeta por normas de fabricación ISO (ISO 2281 e ISO 6425) ellas nos indican las propiedades específicas de la estanqueidad sean 30, 50, 100, 150, 200 o más metros, según lo indique el propio reloj.
Esta resistencia al agua de los relojes se mide mediante pruebas efectuadas en laboratorios en condiciones equivalentes a las de un nadador o buceador sentado en posición inmóvil a dicha presión. Sin embargo, muchas actividades acuáticas requieren un elevado número de movimientos, y se ven afectadas también por otras variables del entorno.
Los fabricantes de relojería no pueden garantizar indefinidamente las propiedades de hermeticidad de un reloj. Se pueden ver afectadas por el desgaste de las juntas o por un golpe accidental. Como mencionan en las instrucciones de uso, se recomienda que acuda a un centro de servicio autorizado para que revise la estanqueidad una vez al año.
Nuestras recomendaciones:
- Revise anualmente la hermeticidad.
- Asegúrese que la corona está firmemente sujeta o atornillada.
- No manipule la corona ni los pulsadores bajo el agua.
- Evite el agua caliente, puede dilatar las juntas y entraría humedad o vapor.
- Si detecta humedad no se quite el reloj de la muñeca, el calor corporal la mantendrá alejada de la maquinaria y tráiganoslo lo antes posible.
- Control estanqueidad por aire vacío y presión
- Daños por cambio de batería sin controles de hermeticidad
- Pruebas de hermeticidad Omega Seamaster Proffesional Co-axial 600 metros
- Daños en Hublot por falta de mantenimiento.
- Hermetismo Tissot Sea-Touch
- Entrada de agua por los pulsadores en Tissot T-Touch Expert